lunes, 28 de junio de 2010

Valiente




Cuando te digo te amo,
Bastan tus dulces ojos,
Y una mirada en el fondo,
Y el alma queda impregnada,

Entonces no le temo a nada,
Ni a la noche o la tormenta,
Ni a la desgracia más cruenta,
Que la vida me depara

Me lleno de luz del alba,
De las suaves, delicadas...
Caricias de madrugada,
Que me brindas con tus labios...

Y comprendo que el amarse,
Tiene un doble fin y efecto,
El de dejarse llevar,
Y el de llevarse por dentro,

Esta pasión-sentimiento
No es de riguroso ensayo, de delirio o de tormento,
Es de compartirse a diario, De regalarse por entero

Hay que besar, amar,
Liberar almas y cuerpos,
Hay que dejarse llevar,

Por el sencillo momento,
Entregarse así sin más
Totalmente, y por completo

Esta ni es cuestión de azar, ni de ceremonia, o reto,
Es la pura libertad, del que ama sin complejos,
Como te amo yo, mucho más allá del tiempo

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